En Costa Rica Carlos fue en su momento técnico de la selección mayor femenina y logró clasificar al Mundial. A seis meses de la Copa del Mundo renunció a su cargo para irse a entrenar a Puerto Rico.
El prestigioso Diario Olé de Argentina publicó una información sobre el momento de Avedissian y un repaso de su carrera.
Carlos tiene 62 años de edad.
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Un trotamundo. Un enamorado de la profesión. Un profesional-formador al cual le apasiona el fútbol. Puede haber muchas más definiciones para Carlos Avedissian, un entrenador que nació en Uruguay hace 62 años y se nacionalizó costarricense un tiempo después. Su larga trayectoria lo llevó a países de distintas culturas y donde el fútbol se vive de diferentes maneras. Su pasión nunca le puso límites, por eso trabajó en su país natal, Costa Rica, Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua y Puerto Rico. Incluso, fue director de selecciones nacionales en este último, donde también dirigió al femenino, al igual que en Costa Rica, con la que clasificó a dos mundiales.
"El fútbol no tiene fronteras", dice Avedissian, ya con los pies en la Argentina. A principios de año, se hizo cargo de Deportivo Zoe, un club que pertenece a Generación Zoe, una asociación que, entre otras cosas, es considerada una de las mejores escuelas de Liderazgo y Coaching del mundo, cuyo CEO es Leonardo Cositorto. "Llegué, en un primer momento, para supervisar el proyecto, pero finalmente me quedé a cargo de la dirección técnica", dice el uruguayo.
Deportivo Zoe hoy participa en el Regional, desde donde busca ganar un ascenso al Federal B. De hecho, va por buen camino: se llevó holgadamente el Apertura y si consigue el Clausura que comienza este sábado, subirá directamente. "En el club nos dedicamos a formar jugadores, para conseguir logros y también para abastecer a instituciones de otras partes del mundo. No buscamos volumen sino calidad, y en la Argentina hay de sobra", cuenta Avedissian. "Dimos un primer paso importante, ya por lo menos tenemos un lugar en la final. El equipo se reforzó con gente de más experiencia para afrontar el Clausura, así que hay ilusión", agrega.
El entrenador es muy creyente: "Le agradezco a Dios, hay que tener mucha fe y a Dios en el corazón. Amo lo que hago y el fútbol argentino es atrapante por su talento y dinámica. Con Deportivo Zoe, mientras Dios lo permita, no hay límites". El club creció a pasos agigantados, tiene todos los elementos necesarios para ascender y juega de local en la cancha de Deportivo Español. "Detectamos talentos, la parte física se puede adquirir. Argentina tiene mucha materia prima, por eso nos piden jugadores de todas partes del mundo. Dirigir en esta liga merece el mismo respeto que cualquier otra. Yo empecé de abajo y después pasé por equipos grandes de Latinoamérica. Hay que estar preparado siempre", remarca el DT.
Y cierra: "Ya clasifiqué a dos mundiales con el femenino de Costa Rica, dirigí también muchos equipos de varones. Ahora acepté este desafío porque Deportivo Zoe era una visión futurista que ya es realidad. Es un club con excelencia y mucho profesionalismo. Y todo eso se está reflejando a nivel deportivo".
