El Feyenoord de Jeyland Mitchell parecía que tendría una noche para el olvido al ir perdiendo 3-0 de visita ante el Manchester City, pero logró sacarle el empate en el cierre del juego.
El tico se volvió a quedar en el banquillo.
El duelo para el cuadro de Guardiola no le fue del todo sencillo ya que en el primer tiempo, pese a tener el control del balón apenas y lograban inquietar a Timon Wellenreuther.
La primera anotación llegó vía penal. El VAR debió entrar en acción para revisar una posible infracción de Quinten Timber sobre Erling Haaland y tas unos minutos confirmó que había penal para los locales. El noruego se encargó de transformarlo en el 1-0 al 44’.
En el complemento, el Manchester City tuvo 3 minutos de ensueño y parecía que dejaban sentenciado el partido. Primero aumentó la ventaja el alemán Ilkay Gündogan al 50’ y luego Haaland firmó su doblete tras la asistencia de Matheus Nunes.
Sin embargo, Brian Priske comenzó a mover el banquillo para darle una nueva imagen a su equipo e intentar maquillar un poco el resultado.
El descuento para el Feyenoord se dio al 75’ por intermedio de Anis Hadj Moussa, quien aprovechó que la defensa se complicó demás para despejar un balón y casi sin ángulo puso el 3-1.
Las acciones siguieron y al 82’ el mexicano Santiago Giménez descontó. Un centro de Timber al segundo palo fue desviado por Jordan Lotomba, el balón pasó entre el palo y Ederson y bajo los tres palo apareció el azteca para anotar con el abdomen.
El ambiente en el Etihad Stadium era de mucha tensión y al minuto 88 se termino de confirmar la remontada. Igor Paixao ganó el balón ante una desesperada salida de Ederson, metió el centro y David Hancko firmó de cabeza el 3-3-
El Manchester City en el cierre del partido se volcó en busca del gol de la victoria, pero el Feyenoord aguantó el empate.