Robert Lewandowski viajó el martes a Alemania, después de finalizar la gira por Estados Unidos con Barcelona, para despedirse de sus ya ex compañeros, aclarar algunas declaraciones que no habían caído bien y además sacarse una foto con la gran cantidad de títulos que logró en sus años en el Bayern Múnich.
Después de sus ocho años en el conjunto bávaro, el polaco quiso tener un detalle con los que fueron sus compañeros y todo el cuerpo técnico: les regaló una botella de champagne a cada uno.
Pero no fue una cualquiera, sino una edición exclusiva de Noble Champagne Armand de Brignac con su firma y fotos de su época en el Bayern en la caja de regalo.
Tras lograr el objetivo de llegar al Barcelona, el goleador pudo pasar un buen momento y despedirse de los jugadores, todo el staff y también pudo reunirse con Hasan Salihamidzic, director deportivo del Bayern, y el CEO del equipo Oliver Kahn.