El Barcelona arrolló al Real Madrid en el clásico español. Uno de los jugadores más destacados fue Pierre-Emerick Aubameyang, autor del primero y del cuarto gol visto en el Santiago Bernabéu.
El gabonés llegó por la puerta de atrás en el mercado invernal. La poca participación con el entrenador Arteta en el Arsenal, con quien se había peleado, hacía presagiar una difícil aclimatación al Camp Nou.
Sin embargo, el delantero ha caído de pie. Suma ya nueve goles en los once partidos disputados con la camiseta azulgrana y es decisivo para el buen hacer del equipo.
Aubameyang, por sus redes sociales, quiso dejar un mensaje a todos los que no creían en él en su llegada al Barcelona: "Hola de parte del jugador acabado".
En uno de los goles, su segundo y el cuarto del Barcelona, a Aubameyang le tiraron una bola de dragón. El delantero lo planificó antes del partido en caso de marcar en el Bernabéu.
"Lo planeé por la mañana. Sabes que a la Bola de Dragón le puedes pedir un deseo, y yo quería ganar el partido y marcar un gol para mis abuelos y mi familia. Tenía ganas de hacer las cosas bien como lo estoy haciendo ahora. Es más fácil cuando juegas en un equipo que juega así", indicó.
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