El partido de este domingo de LaLiga entre el Granada y el Athletic Club Bilbao ha quedado suspendido en el minuto 18 y tras casi una hora detenido debido al fallecimiento de un aficionado que se encontraba en la gradería.
La decisión final de suspender el juego se dio en consenso entre ambos clubes y el Granada informó por medio de los alto parlantes el motivo, un acto que fue aplaudido por los aficionados.
Los hechos se dieron a uno del minuto 18, cuando el arquero del Bilbao, Unai Simón, le avisó al asistente Santiago Sacristán que había un problema en la gradería ante el revuelo de los aficionados de esa zona. Rápidamente los equipos médicos de los dos equipos se trasladaron, aunque allí ya estaban los médicos de urgencia que trabajan en el estadio Nuevo Los Cármenes.
Durante varios minutos los futbolistas aguardaron en el terreno de juego a que la reanimación fuera efectiva, pero la misma se dilataba en el tiempo y el árbitro Ortiz Arias y el director del partido tomaron la decisión de enviar a los protagonistas al vestuario.
Los dirigentes del Granada y Athletic bajaron del palco a los vestuarios para conocer más detalles sobre lo sucedido. La idea original era que una vez el aficionado fuera reanimado y trasladado al centro médico se reanudara el partido, pero pese a los esfuerzos de los médicos no pudieron hacer nada por su vida. Ante la lamentable noticia los equipos acordaron suspender el juego en el minuto 18 y cuando el Bilbao estaba por delante 0-1 gracias al tanto de Iñaki Williams.
Ahora queda en manos de LaLiga cuando se estará reanudando el juego que le restan 72 minutos.
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