Por la jornada 38 de la Ligue 1, el Paris Saint-Germain cayó por 2-3 ante el Clermont en el Parque de los Príncipes y culminó, a pesar de haber conseguido el torneo doméstico, con derrota la temporada 2022-23.
Además, el cuadro de la capital, en la previa al duelo, confirmó que Leo Messi y Sergio Ramos jugaron su último partido con la elástica parisina.
El Clermont, que no se jugaba nada en el último partido de la Ligue 1, sorprendió al elenco parisino con un comienzo furioso. Los hombres de Pascal Gastien se llevaron una gran victoria para ilusionarse con Europa en el próximo curso (2-3).
Minuto Rico, minuto Ramos
Corría el minuto 16 cuando el PSG consiguió el primer tanto del partido. Con el público de pie y aplaudiendo para enviarle mensajes de ánimos a Sergio Rico tras su accidente con el caballo, apareció Ramos para marcar el 1-0.
Messi jugó en corto con Vitinha y el portugués, sin marca y que nadie le estorbará, envió un centro medido para que el ex del Madrid consiguiera despedirse de Francia con un tanto en el bolsillo.
Con Mbappé no alcanza
Tras el 1-0, el PSG fue al acecho y aumentó el marcador después de un insólito penalti cometido sobre Achraf Hakimi.
Kylian tomó el cuero y no dudó. Balón para un lado, portero para el otro y partido encarrilado, pero el Clermont sabía que estaba en partido.
Grejohn Kyei fue el encargado de comandar la remontada de los suyos en el primer tiempo para certificarla en la segunda parte. Tras aprovechar un pésimo pase de Verratti en el área pequeña, fue Gastien el que anotó el del descuento.
La visita fue más allá e intentó llegar al empate lo más rápido posible. Gracias a la continuidad en la jugada, Zeffane se encontró el cuero muerto en el punto de penalti después de una salva formidable de Donnarrumma y certificó el empate en el añadido.
Adiós
En el Parque de los Príncipes esperaban con ansias la marcha de Leo Messi. Después del viaje a Arabia Saudí, la relación con el argentino se rompió y los aficionados se lo han dejado saber en cada uno de los partidos. Después de haberlo anunciado en sus redes sociales, el público presente lo recibió en su último juego con un aluvión de silbidos.
Tras haberlo intentado una detrás de otra, el ex del Barcelona no se pudo despedir del PSG con un gol bajo el brazo. Pudo haber marcado el 3-2 después de una contra comandada por Mbappé en el 54', pero su disparo salió muy desviado.
Para colmo, 7 minutos más tarde llegó el 2-3 del Clermont. Después de haber desperdiciado un penalti, Grejohn Kyei se encargó de poder anotarse en el marcado.
El delantero recibió un centro desde la izquierda y aprovechó la desatención defensiva del Paris para certificar la victoria y remontada ante el campeón de la Ligue 1.
Muchas dudas rondarán sobre el futuro de Messi, pero el argentino, después de haber salido campeón del mundo, nunca pudo volver a sonreír en un club y con una hinchada que, a pesar de todo, nunca lo sintieron propio y eso terminó por costarle caro.