El Chelsea sacó a relucir su mejor versión vencer 2-0 al Borussia Dortmund en Stamford Bridge y llegar su clasificación a los cuartos de final de la Champions League. El juego se retrasó 10 minutos debido al tráfico de Londres que impidió a los fanáticos llegar al estadio a tiempo.
Chelsea asumió la responsabilidad de dar vuelta la serie en casa y en los primeros diez minutos puso contra las cuertas al Borussia Dortmund con una acción de João Félix que atoró Alexander Meyer y, luego, con un derechazo de Kai Havertz que tuvo potencia pero careció de dirección.
La primera situación de verdadero peligro en Stamford Bridge la tuvo el conjunto alemán con un tiro libre de Marco Reus, apenas pasado el cuarto de hora inicial, que necesitó de una volada providencial del español, Kepa Arrizabalaga para desactivar lo que era un verdadero golazo de pelota parada.
Los dirigidos por Graham Potter seguían tomando la iniciativa y, en la recta final del primer período, mostraron su mejores armas. A los 27 minutos, Reece James mandó un centro, Marius Wolf despejó a medias, y Havertz con un zurdazo reventó el palo izquierdo de Meyer.
Chelsea no bajaba el ritmo. El croata, Mateo Kovacic, probó con una volea desde la medialuna que se fue apenas alto. Más tarde Meyer le tapó un mano a mano a Raheem Sterling y, en el rebote, Havertz clavó un golazo que fue anulado por fuera de juego previo del ex atacante del Manchester City.
Borussia Dortmund estaba contra las cuerdas, necesitaba que termine el primer tiempo para sostener la ventaja de la serie, y encima entre Kalidou Koulibaly y João Félix no podían empujar una pelota en el área chica como para darle una alegría a la escuadra inglesa.
El premio a la insistencia y al protagonismo para los Blues llegó a los 43 minutos tras un desborde por izquierda de Ben Chilwell que lanzó el buscapié. Sterling recibió, no le pudo pegar de movida aunque Reus le dio un tiempo más para que el buen de Raheem no perdone y le queme las redes a Meyer.
Con la serie empatada, Borussia Dortmund recibió una trompada de nocáut en el comienzo de la complementaria. Se jugaban los segundos iniciales de la segunda parte, Chilwell mandó un centro y la pelota dio en el brazo de Wolf para que Danny Makkelie, apoyándose en el VAR, terminase sancionado el penal.
La pena máxima la ejecutó Havertz cuando ya iban 5 minutos. El alemán estrelló su zapatazo en el palo pero la felicidad para el Aurinegro duró muy poco ya que el árbitro hizo repetir la ejecución por invasión del equipo de Edin Terzic. Así, el delantero germano eligió otra vez el mismo hueco pero acertó y puso el 2 a 0.
La visita, quedándose fuera de competencia, tuvo ocasiones para empatar la serie. Jude Bellingham desperdició una inmejorable tras encontrarse con un regalo en la pueta del área chica. También Wolf exigió con un derechazo a Arrizabalaga que respondió maravillosamente.
Dejándole espacios para el contragolpe, los de Potter encabezaron un contragolpe con Sterling que terminó empujando Conor Gallagher contra la cueva alemana. No obstante, una vez más, el juez de línea alzó la bandera y todo quedó anulado por fuera de juego de los ingleses.
Con el reloj en su contra, y cerrando el partido en el arco rival, Borussia Dortmund se despidió con un tibio cabezazo de Bellingham y poco más. Chelsea, que había caído 1 a 0 en Renania del Norte, eliminó a un rival que había ganado todo en 2023 con un merecido 2 a 0 que lo metió en cuartos de final de la Champions League.
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