CORRER POR SU VIDA
La broma tuvo como protagonistas a Nicky Butt y el portero danés Peter Schmeichel.
Butt quería tirarle agua caliente al portero mientras este se encontraba en la ducha. El mediocampista sostenía una tetera llena de agua caliente y caminaba sigilosamente hacia las duchas para verter el agua en los glúteos de Schmeichel, pero todo salió mal.
Butt no tuvo el timing perfecto y es que le tiro el agua, cuando el danés se estaba dando vuelta y terminó en los genitales. Era más que obvio que el meta no estaba contento y como dijo Japp Spam en su libro, "Nicky tuvo que correr por su vida".