La posibilidad de hacer contacto con seres vivos que no son del planeta Tierra ha sido un tema de interés para astrónomos y científicos desde tiempos inmemoriales.
El caso de las Ráfagas Rápidas de Radio 121102 (FRB por sus siglas en inglés) puso sobre la palestra la teoría de que organismos pensantes fuera de la Tierra intentaban entablar comunicación con la humanidad y ahora, un nuevo suceso ha conmocionado a la comunidad científica por las mismas razones.
Un reporte elaborado por el grupo de investigadores del Canadian Hydrogen Intensity Mapping Experiment Fast Radio Burst Project (CHIME/FRB) puso en evidencia la primera identificación de una señal de radio proveniente de otra galaxia enviada a nuestro planeta en intervalos de tiempo fijos.
La investigación bautizó a la señal con el código FRB 180916.J0158+65 y los detalles que estipulan en el documento publicado por los científicos dejan abierta más de una posibilidad respecto a su emisor.
Según el reporte, la señal fue recibida de forma constante cada 16 días como pudo ser comprobado gracias a la exactitud de la transmisión. Entre septiembre de 2018 y octubre de 2019, la señal apareció por cuatro días consecutivos para desaparecer 12 días completos posteriormente y así renovar el ciclo.
Otros datos interesantes de la investigación arrojaron que la señal proviene de la galaxia SDSS J015800.28+654253.0, ubicada a 500 millones de años luz del planeta Tierra. El grupo desconoce el verdadero motivo por el que estas señales son enviadas a nuestro planeta pero se juega con la posibilidad de que, al igual que con el caso anterior, se trate de un sistema estelar binario afectado por un agujero negro.
La probabilidad de que se traten de extraterrestres o alienígenas es extremadamente baja pero no ha sido descartada por los investigadores. Cabe resaltar que este hallazgo no se produjo inmediatamente, por lo que su revelación al mundo tuvo que esperar hasta el 3 de febrero del presente año 2020.
Un suceso con un pasado similar
El 17 de noviembre del 2019, investigadores de la Universidad de Cornell detectaron unas explosiones de luces que se desvanecen en milisegundos llamadas: Fast Radio Burns (FRB). Estos flashes provienen de todo el universo a más de 3 mil millones de años luz de distancia. Sin embargo, nadie sabe cómo se originan.
La teoría más fuerte al respecto afirma que los FRB pueden provenir de magnetares, estrellas muy densas con potentes campos magnéticos. La única prueba de este postulado es que el FRB 121102, descubierto en 2012, ha lanzado 150 destellos durante los últimos años, sugiriendo que los brillos no son de una sola explosión.
Fuente: rpp.pe/ciencia